Buena parte de la medicina moderna se basa en hallazgos y avances que se produjeron entre la segunda mitad del siglo XIX y la primera mitad del XX. Este mes de agosto recordamos cómo estos avances en inmunología, esterilización o diagnóstico profesionalizaron el campo de la medicina y favorecieron la mejora de la calidad de vida de los habitantes de todo el mundo. Además, repasamos algunos de estos progresos, desde los orígenes de la anestesia, las vacunas o la antisepsia hasta el descubrimiento de los antibióticos. Recordamos también a mujeres como Mary Shelley, que nació un 30 de agosto y escribió, a principios del s.XIX, su novela Frankenstein, considerada la primera obra de ciencia ficción de la historia. O a Maria Mitchell, la astrónoma que fue una gran pionera en una época en la que la presencia de la mujer en entornos científicos y tecnológicos profesionales era muy escasa. Ella abrió las puertas a las científicas estadounidenses a instituciones, como universidades y observatorios.
Ventana al conocimiento
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